Criticaré la matanza en nombre de cualquier dios,
mas defenderé la defensa de la democracia a punta de balas.
Reconoceré con hidalguía y entereza como todo un hombre,
toda la corrupción que me han atrapado ocultando como un cobarde.
Defenderé todo el reino animal,
pero primero, echaré un poco de veneno para ratas en la cocina antes de acostarme.
Seré un pacifista sentado sobre una bomba atómica gringa,
alertando al mundo del peligro del terrorismo en todas partes.
Seré libre de matar a quien quiera que no piense como yo.
Todo sea por hacer que mis hijos lleguen a ser padres.
Seré libre de quitarte la libertad de plantar lo que quieras y drogarte,
pero lo haré luego de tomar mis analgésicos y anfetaminas recetados por el doctor.
Te diré que los tiempos son difíciles y que debes el cinturón apretarte.
Por otra parte, bájate el pantalón, aquí vienen nuevos recortes salariales.
Atraparé un pobre ladrón en la calle y haré que el mundo entero valore mi acción,
Mientras mañana, haré fila para votar y darle a un político: mis impuestos, un sueldo y un sillón.
Por Pablo Mirlo
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¿Puedo rebloguear?
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Por supuesto 🙂
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Terribles paradojas que hemos creado con nuestro terrible ritmo democrático. Hay mucho que revisar.
Esto hay que leerlo varias veces.
¡Ánimo!
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Hay que seguir luchando desde nuestra trinchera 🙂
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